El día de Todos los Santos

Cementerio polaco

Llega el Día de todos los Santos, y en Polonia, como nación católica que es, se considera como una de las festividades más importantes del año. 

En España estamos familiarizados con esta festividad. Es también algo habitual acudir junto a la familia al cementerio para recordar aquellos seres queridos que ya no están entre nosotros. Se limpian las tumbas, se adornan y desgraciadamente igual no pase nadie por la mayoría de ellas hasta el próximo año.

Pero en Polonia este día es todo un acontecimiento. Además de ser una festividad de corte familiar en la que todo el mundo se reúne desde por la mañana para disfrutar del día en familia, y de que también se acaba acudiendo al cementerio, aquí es tremendamente pintoresco. 

Para empezar los cementerios polacos son majestuosas obras de arte, dignas de película, a veces de película de miedo también. Pero aquí se lleva mucho el llevar velas a las tumbas, pero no unos cirios rojos y ya. Velas que van dentro de pequeñas lamparas de colores, por lo que transforman los cementerios en todo un espectáculo.

Además la gente no solo acude a ver a sus familiares y amigos, grandes masas se acercan a  tumbas de personajes importantes como artistas, políticos o músicos y los caminos de los cementerios acumulan tantas velas que se convierten en alfombras de luz.

Digno de ver y conocer, ayuda también el hecho de que anochezca sobre las 4 de la tarde para disfrutar del espectáculo.